lunes, 14 de septiembre de 2009

Geografía General

Aspectos Geopolíticos

Villa Gobernador Gálvez, se encuentra ubicada en el departamento Rosario, en la provincia de Santa Fe, en el meridiano 61º y paralelo 33º. Solo la separa de la ciudad de Rosario el arroyo Saladillo, habiéndose convertido en el transcurso de los años, casi en una continuación de aquella. Tiene una superficie de 37 Km.2 y una población de 100.000 habitantes.

Límites

El límite Este, bañado por el río Paraná, es netamente fluvial, barrancoso. El límite Norte lo constituye el Arroyo Saladillo. El Límite Sur es la vecina localidad de Alvear, y el Límite Oeste es la Ruta Nacional Nº 178, continuación de la calle Ovidio Lagos – de Rosario-, que la separa del distrito Piñero, tal vez este Límite es el menos reconocido, pues la traza de la autopista Tte. Gral. Eugenio Aramburu, aíslo en alguna medida una gran superficie de tierras, en sus mayorías dedicadas a la ganadería.

Clima

El clima es propicio para la vida del hombre y sus actividades. La temperatura es en general benigna, pues su medida actual oscila en los 15º C.
Las lluvias se dan a lo largo de todo el año, la media anual está en el orden de los 1.000 mm. Y en invierno se producen heladas (que han decrecido en número en las últimas temporadas).
Tienen influencia los Vientos aislados, cálidos y húmedos, que soplan sobre el continente. Además de estos vientos tienen influencia los locales, propios de la pampa húmeda: el Pampero (que es característico de la pampa), corre de Sudoeste a Noroeste y a veces alcanza gran magnitud, el Norte, y la Sudestada. El pampero es Frío y seco. El Norte es cálido y húmedo. La Sudestada es fría y húmeda. Los vientos del Norte y Sudeste traen humedad desde el Océano Atlántico. Cuando estos vientos soplan es muy probable que produzcan lluvias.

Región Geografía

Características Generales

Esta zona pertenece a la región natural conocida con el nombre de Pampa Ondulada. La pendiente de la llanura es muy suave de sudoeste a noroeste, terminando sobre el Río Paraná con una orilla barrancosa. La tierra que ha quedado libre, es fértil, apta para la siembra.
El Arroyo saladillo que vierte sus aguas al Río Paraná ha pasado por distintos momentos, del esplendor de los balnearios a ser el depositario de afluentes diversos que lo contaminan.
El primer trecho en la ciudad, está canalizado (profundización, ensanche y rectificación del cauce natural) para evacuar el agua precipitada sobre un área tributaria de 3.000 Km.2, ya que su cuenca es muy amplia.
La capacidad del canal es de 400m3 por segundo sin desborde. Por efecto de la canalización del arroyo, se formó un sector apto para cancha de remo.
En el segundo tramo, existieron balnearios: el Municipal de Villa Gobernador Gálvez, se enfrentaba al de la margen rosarina, el balneario del Club Guillermo Tell, y conformaban el lugar de esparcimiento en la temporada estival. Ambos desaparecieron en los años de la canalización en especial por los aportes de afluentes cloacales en la margen izquierda.
Al cruzar el Parque Regional Sur (de difícil acceso para su utilización a los habitantes de esta ciudad) el arroyo forma una cascada natural de gran belleza. Es la zona de las conocidas quebradas del Saladillo. Corresponde a Villa Gobernador Gálvez el 75% de la superficie del Parque. Por tener algunos sectores vírgenes, es el lugar ideal para el reconocimiento de especies vegetales y animales silvestres, circuitos ecológicos y vida en naturaleza.
El arroyo desemboca en el año 1863 en el río Paraná con un solo Brazo. El actual brazo Sur, era un zanjón barrancoso que se llamaba Boquerón o Barrancas del Sur. Al construir Don Manuel Arijón los “Baños del Saladillo”, hizo realizar obras de canalización abriendo el brazo sur y las manzanas que quedaron delimitadas fueron anexadas al municipio de Rosario en 1933.
Así, desemboca actualmente en el Río Paraná en dos brazos: denominados Norte y Sur. El límite actual de nuestra ciudad con la de Rosario es el Brazo Sur.
Villa Gdor. Gálvez limita al este, como ya dijimos anteriormente, con el río Paraná con una extensión de costa aproximada de 5.000 metros, frente éste que se muestra barrancoso, característica permanente de asta margen del río frente a la zona deltaica del Paraná, que es contrario a lo que se puede observar en el norte de la provincia. El Paraná tiene las mínimas entre los meses de septiembre y octubre, con crecidas eventuales que actualmente se ven influenciadas por los controles que ejercen las represas hidroeléctricas río arriba, su caudal es de aproximadamente 15.000m3 por segundos, convirtiéndolo en uno de los ríos más importantes del mundo.
En territorio comprende una porción de estepa cubierta de pastos donde predominan las gramíneas como: Cebadilla, Gramilla, Trébol y Malva, y encontrándose aún Manzanillas, Cardos y Abrojos en terrenos no ocupados por el hombre.
En las barrancas de la costa se visualizan Sauces, Espinillos y Ceibos, Clavel del aire y Líquenes como Barbas de Viejo. En las zonas de transición cercanas al arroyo y al río se observan Juncos, Sagitarias, Totoras y donde se conserva el agua, Camalotes y Lentejas de Agua y Salvinias.
Se pueden encontrar cañas, en especial cerca de las vías del ferrocarril, colocadas por el hombre para evitar el desmoronamiento de los terraplenes y en la zona de quintas, las que son utilizadas en la producción frutihortícola de la zona. Todavía perdura en algunos lugares las Enredaderas típicas de la región, que en otras épocas se presentaban a cada trecho, entre otra, Campanillas, Madreselvas, Pasionarias o Mburucuyá.
Con respecto a la fauna silvestre, es típica de la pampa húmeda: Lagartijas, Culebras, Sapos, Roedores, Comadrejas, Liebres, y entre las aves, Perdices, Garcitas, Teros Reales, Patos (en especial el Sirirí o Pato Silbador), Gorriones, Jilgueros, Chingolos, Benteveos, Calandrias, Horneros, Corbatitas Grises, Gaviotas, Palomas y Picaflores, Carpinteros de Copete Amarillo, Martín Pescador, y algunas aves rapaces como El Carancho. En el río Paraná se pesca fundamentalmente, Boga, Sábalo, Armado, Patí, Pejerrey, Bagre, Surubí y Dorado. En la temporada veraniega y con las frecuentes lluvias pululan insectos como los Mosquitos, Moscas, Jejenes, Cigarras, y Hormigas.
El hombre fue modificando el aspecto originario del lugar, transformándolo en gran parte en zonas de cultivos, la mayoría de las cuales se volvieron a modificar, debido a los loteos para la urbanización. En las quintas aún existentes se cultivan frutas y hortalizas y dentro de los cereales la Soja que vino a reemplazar al trigo y al maíz, a fines de la década del setenta y a principios de los años ochenta. También se explota la floricultura bajo cubierta y la apicultura. Como protectores de los cultivos y suelos o como pulmones de la ciudad, podemos observar árboles como los eucaliptos de la Estación Coronel Aguirre, las Casuarinas del Boulevard San Diego, de los Paraísos y Fresnos del arbolado público, los Plátanos de la Plaza General san Martín, los Pinos, los Álamos, los Sauces del río, Palos Borrachos, Ceibos, y Jacarandaes como los del Colegio Teodelina Fernández de Alvear y algunos solitarios como el Arce frente a la Parroquia San Enrique, el Roble de la Plaza a la Madre, Tipas, Aguaribay, Timbó, Palmera como la de la Escuela Isidro Aliau y Ombués como los del Parque Sur.
La explotación ganadera como tal no esta desarrollada dada las características de urbanización de la ciudad hoy, los escasos animales existentes corresponden al ganado vacuno, equino y porcino, estos últimos con carácter industrial. Con respecto a la avicultura, se desarrolla la explotación de aves de corral en los establecimientos avícolas y en casas particulares.